1. La estampación por medio de huellas. La manera más sencilla para hacerlo es la de estampar con las manos, además de poner en contacto nuestro mundo interno con el externo de una manera más directa.
También se puede hacer con patatas, corcho o cartón o con cualquier tipo de objeto planos como hojas, redes, puntillas, formas con distintas texturas, etc.
2. Realización de monotipos. Sobre una plancha de plástico se pintan las formas o figuras deseadas con pintura soluble al agua. Se tiene preparado un papel grueso y poroso y se sumerge en el agua hasta que se haya empapado bien, se saca el papel y se escurre, secando el exceso de agua . Con el papel húmedo se presiona sobre la superficie pintada presionando de forma uniforme con un rodillo de goma y se logra que la pintura pase desde la plancha al papel.
Otra opción es hacer el dibujo sobre el papel de lija. Éste nos permite hacer cuatro o cinco copias, además de aportar nuevas texturas.
3. Estampar por medio de rodillos de caucho o de goma.
Existen muchas variantes en esta técnica, como hacer franjas o manchas con cola, echar sal, arena o trocitos de cartón, hojas, lana o redes sobre la superficie. Untamos los rodillos con pinturas solubles al agua y repetimos el proceso de grabar.
4. Hacer decalcomanías.
André Bretón
Oscar Dominguez
La decalcomanía es una técnica inventada por el pintor surrealista Oscar Dominguez. En esta técnica el automatismo psíquico tiene un protagonismo absoluto.
Consiste en extender mediante un pincel grueso témpera negra más o menos diluida en distintos puntos de una hoja de papel satinado blanco. Se recubre inmediatamente con otro papel sobre el que se ejerce una ligera presión y se levanta suavemente.
El resultado es una creación fantástica, un paisaje único y desconocido, fruto de las leyes del azar.